Las caries aparecen cuando las bacterias y los restos de alimentos que quedan en los dientes no se eliminan mediante el cepillado. Los ácidos se acumulan en los dientes y ablandan su esmalte hasta que se forman agujeros o cavidades. En este artículo aprenderemos a prevenirlas.
Para deshacerte del mal olor en tu boca lo primero que necesitas es beber mucha agua, esta se encargará de lavar los compuestos sulfúricos que se generan en la cavidad oral y que causan el mal aliento o halitosis.
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Después puedes consumir vegetales fibrosos con un alto contenido de agua, como el pepino, el apio o la zanahoria. Su contenido en agua limpia la boca y al masticarlos, su textura fibrosa hace que generes más saliva. Estos vegetales son como una combinación de una pasta dental y un enjuague bucal naturales, provistos por la madre naturaleza.
Finalmente, llevar una buena higiene bucal también evitará el mal aliento: Lávate los dientes después de comer, usa hilo dental al menos una vez al día y cepíllate la lengua.
Se recomienda tener cuidado con los alimentos aparentemente inocentes pero que tienen azúcar escondido, como los zumos de fruta, los cereales o algunas comidas precocinadas. Por ejemplo, es mejor comer una naranja que beber un zumo de naranja embotellado. La leche es otro de los alimentos que puede traicionar, particularmente en los niños: si bien su contenido en calcio lo hace recomendable para los dientes, también contiene azúcar. Por otro lado, algunos niños se quedan dormidos con el biberón en la boca o no se cepillan los dientes después de beber leche y eso también contribuye a la formación de caries.
Si bien a priori parece ser algo más común en niños, que aún llevan dientes de leche, también es normal que pase en adultos. Son emergencias que recibimos regularmente en la clínica. Un diente puede romperse por una caída, un accidente o simplemente por morder algo demasiado duro. Dada su posición en la parte frontal de la boca, los dientes que más posibilidades tienen de romperse son los incisivos centrales superiores. Y esto altera, no sólo la masticación, sino como también la estética de la boca.
¿Te sangran durante el cepillado? Esto puede ser síntoma de periodontitis, enfermedad que afecta a las encías y los tejidos blandos que soportan los dientes.
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Es importante detectar a tiempo esta enfermedad antes de que se profundice y afecte al hueso de la mandíbula. Para esto es necesario darle solución a esta patología a través de un plan de tratamiento personalizado para cada paciente.
Es importante que cuando visites a tu odontólog@ te encuentres tranquilo, de esta forma le transmitirás tranquilidad al profesional, que podrá trabajar adecuadamente y sin contratiempos. Recuerda que el avance en medicina, medicamentos, tratamientos y tecnología han vuelto los tratamientos indoloros para el paciente. Por ello:
Y ahora que estás más relajado, reflexiona, ¿Qué es lo que te hace sentir nervioso cuando acudes al dentista? ¿Cómo crees que podríamos ayudarte?
La estética dental trabaja en los problemas de salud dental relacionados con la ARMONÍA ESTÉTICA DE LA BOCA lo que se traduce básicamente en lograr una sonrisa perfecta, afeada por diferentes tipos de problemas:
En el artículo de hoy descubriremos 8 síntomas que nos alertan sobre la existencia de caries. Ante la duda, consulta con tu odontólog@ de confianza.
1. Molestia o dolor en la boca.
2. Pérdida o rotura de un diente.
3. Mal aliento o mal sabor de boca.
4. Sensibilidad dental.
5. Cambio de color en un diente.
6. Sangrado al cepillarse los dientes.
7. Absceso dental e infección.
8. Aparición de agujeros en los dientes.
Visitas regulares al dentista son importante porque ayudan a mantener los dientes y las encías saludables. Lo ideal, como regla general, es realizar una visita dental al menos una vez al año o incluso una cada 6 meses. Aun así es recomendable seguir el criterio del profesional según la situación de cada uno.
El primer paso importante que debe realizar el dentista es identificar este tipo de pacientes. Un análisis detallado es fundamental para comprender cómo están nuestros pacientes en relación con la salud general. En algunos casos, el propio dentista puede sospechar que el paciente tiene diabetes. Se estima que de cada dos personas que padecen la enfermedad, una de ellas desconoce el diagnóstico.
Leer más: ¿Existe algún riesgo durante los procedimientos para pacientes con diabetes?
Otra de las cosas importantes que debemos hacer para mantener una buena salud bucodental es utilizar el hilo dental de manera periódica.
